Por la transparencia y el rigor periodístico

Publicado: abril 29, 2013 en Patricia López Llamas
Etiquetas:, , , ,

Patricia LópezPROVOL_01_PATRICIALÓPEZ

Artículo de opinión basado en…

  Ignacio Ramonet. La explosión del periodismo         

La explosión del periodismo

De los medios de masas a la masa de los medios

Autor: Ignacio Ramonet

Año de publicación: 2011

Nº páginas: 155

La mayoría de los periodistas sueñan con un ejercicio de la profesión lo más objetivo posible, mostrando e informando sobre la realidad tal como es, sin importar los intereses económicos o la ideología política a la que el medio para el que trabaja es afín. La manipulación está muy cercana a los medios de comunicación, y más en estos tiempos.

La idea es hacernos creer que estamos en el mejor de los mundos y, aunque vayamos mal, probablemente en otros países se está peor y si aplicásemos otra política sería peor. Esta es la maqueta. Ahí los medios de comunicación juegan un papel ideológico” desvelaba Ignacio Ramonet en una entrevista allá por el año 2000 cuando Argentina se enfrentaba a una profunda recesión por las políticas de ajustes de por el entonces presidente del gobierno Carlos Menem.

A partir de esto entra en juego la manipulación informativa, los elementos que modifican la maqueta según los intereses del momento. “El proceso de comunicación empieza a perturbarse en la propia fuente de la noticia cuando esta es contraria a los intereses de cualquier grupo de poder, ya sea público o privado y la historia ha demostrado que en situaciones de crisis, cualquier Gobierno intenta imponer restricciones a la libertad de información, aunque sea a expensas de su propia credibilidad”. Así es como Pedro Soler, introduce el tema sobre manipulación informativa a sus alumnos de la UNED.

Ejemplos de manipulación en la prensa española como el 11M, o la designación del presidente de TVE por el partido gobernante, inspiran a muchos periodistas a crear nuevas cabeceras como La Marea, eldiario.es o Periodismo Humano, con las que apostar por un periodismo de rigor y principios, que realmente se cumplan.

Estos medios de comunicación contribuyen a dignificar la profesión periodística que en estos momentos se encuentra en detrimento. “El periodismo de especulación, de entretenimiento y de espectáculo triunfa en detrimento de la exigencia y la calidad”. Es lo que ocurre cuando se intenta hacer un producto para una audiencia y no transmitir una información a la sociedad. El negocio periodístico está en auge. Y, según Ignacio Ramonet, los gigantescos imperios creados por “los grandes grupos mediáticos no se proponen el compromiso cívico de convertirse en cuarto poder” y si lo hicieran sería junto a la política, la economía y las finanzas.

El punto clave y el objetivo que se deberían de marcar los medios de comunicación en general y los periodistas en particular sería, como reza Ramonet en su libro, la creación de un quinto poder esencial e indispensable para asegurar el rigor y la veracidad de la información más allá de la calidad del producto periodístico, sin duda muy importante. Es necesaria un órgano de autorregulación a través del cual poder denunciar las prácticas irregulares de los grandes medios de comunicación, que en vez de apostar por la ciudadanía actúan como partidos políticos demonizando y reprimiendo los derechos civiles como las manifestaciones o las reivindicaciones.

medios de manipulacionLa manipulación está creando una burbuja de desconfianza que revienta la credibilidad de los medios de comunicación, puestos cada vez más al servicio de las empresas y no de los ciudadanos. La globalización está perjudicando al periodismo de calidad que se ve afectado por la lucha que se origina entre los propios medios de comunicación.

La transparencia es la solución al abuso del poder, por ello apareció WikiLeaks, una plataforma en pro de los beneficios de la sociedad que muchos medios se empeñaron en echar por tierra declarándose a favor de los intereses de los gobernantes.

Por ello los lectores se ven abocados a un mar de contradicciones que les dificulta mantener su fidelidad a un medio concreto. Y si a esto le sumas la crisis económica mundial, el resultado son medios que no se sostienen. Las mentiras se pagan caras. Tan sólo sobrevivirán “los periódicos que no han traicionado a sus lectores y han sabido conservar su credibilidad y mantener su exigencia de calidad”.

Deja un comentario